La Bestia de Tenby

Todos sabemos que de cuando en cuando saltan a los medios inquietantes noticias sobre misteriosos animales que aparecen muertos por las playas de cualquier parte del mundo y que aparentemente desafían la lógica al no parecer corresponder de entrada a ninguna especie conocida.

Hoy os quiero comentar por si no llegasteis a conocer el caso en su día, una de esas extrañas apariciones.

Los hechos tuvieron lugar en esta ocasión en una de las cuatro playas de las que disfruta la bonita y turística localidad galesa de Tenby, ubicada en la comarca de Pembroke, en la esquina Suroeste de Gran Bretaña, el último fin de semana del pasado Febrero de 2013. Y fueron saltando a los medios internacionales, incluida España, en los primeros días de Marzo.

Todo comenzó cuando un habitante del lugar de 27 años, cuyo nombre es Peter Bailey, bajó a dar un paseo y de paso sacar también a pasear a su perro, por la denominada como South Beach. En un determinado momento y ya en la playa el perro se separó de su dueño y éste comenzó a oírle ladrar nervioso aunque un pequeño montículo impedía en ese momento que Peter lo viera.

Cuando comenzó a acercarse pudo ver como el animal corría en círculos alrededor de algo que había en la playa y que aún no podía vislumbrar con claridad.

La sorpresa se la llevó al llegar por fin junto al perro y comprobar que lo que allí había era el cadáver de un extraño ser, que según sus propias palabras al principio confundió con un caballo, pero cuando se acercó hasta casi tocarlo observó asombrado que de caballo nada. Según otra vez el propio Peter, se dio cuenta de que más bien el extraño animal parecía tener cuerpo de cerdo pero patas de oso y colmillos como de lobo. Conservaba aún algo de pelo y además no desprendía el más mínimo olor, cosa que le pareció también muy extraña toda vez que parecía claramente que el animal estaba en descomposición.

Junto a sus declaraciones a la prensa se añadieron un par de fotos que Peter había llegado a tomar y ni que decir tiene que el caso rápidamente pasó a ser noticia de primera plana cuando el Western Telegraph publicó ese primer artículo.

Nadie sabía qué era aquello que había aparecido por sorpresa en sus playas y de inmediato las gentes del lugar lo bautizaron como “La Bestia de Tenby”, nombre con el que se pasaría a conocer ya en el resto del mundo.

Ni que decir tiene que a muchos les recordaron a los famosos monstruos de Brooklyn y Montauk, de los que hablé en su día (https://www.misterioanimal.com/un-monstruo-en-brooklyn/), aunque a la vista de las imágenes daba la impresión de que independientemente de su clasificación real, los restos encontrados en cada caso no parecían corresponder a las mismas especies.

Las primeras especulaciones procedentes de los especialistas de la zona hablaron de un tejón aunque pronto se descartó esa teoría. Posteriormente el personal del Pembrokeshire College’s Animal Care, acabó deduciendo que se trataba de algún individuo procedente del cruce de dos razas de perro. Parece que las candidatas eran el Pastor Alemán y el Bull Terrier.

Y la verdad es que a nivel oficial tampoco se pudo avanzar mucho más. No hay nada más categórico como análisis de muestras de tejido, o de ADN. Y no lo hay por algo tan simple como que al igual que sucedió en otros casos, el cadáver se perdió y nadie sabe qué fue del mismo, sin que diera tiempo a realizar pruebas más exhaustivas y sin que haya una explicación convincente y detallada de cómo sucedió. Pero lo cierto es que ya nadie sabe dónde fue a parar el extraño animal.

Eso hace que una vez más dé la impresión de que ante un hecho que puede resultar molesto o que puede dar lugar a muchas preguntas y explicaciones incómodas, el proceder habitual desde las instancias oficiales es despacharlo con una explicación rápida de compromiso, hacer que se esfume y esperar que escampe y la gente se olvide, antes que poner todos los medios para resolver el enigma sea cual fuere el resultado que se obtuviera y lo que representase. No digo tampoco que sin más haya que dudar de cualquier explicación oficialista, pero siempre que esta vaya adecuadamente fundamentada y se vea que realmente se ha intentado por todos los medios despejar la incógnita, cosa que sin embargo no es lo que suele suceder.

Si hablamos un poco sobre lo que se sabe de este caso, recordaremos en primer lugar que el testigo habló de que su primera impresión es que se trataba de un caballo, eso nos da una primera idea del posible tamaño del animal, ya que por desgracia las fotos no permiten hacerse una idea real de ello. Teniendo esto en cuenta no resultaría fácil concluir que el animal era un cruce de dos perros como los que se sugerían.

Ahora bien a pesar de que Peter habló de un caballo con claridad, es decir no empleó la palabra “potro” o “cría”, podemos considerar que pensase en algo del tamaño de un potrillo, con lo que entonces por dimensiones sí podría encajar el cruce canino.

Por la descomposición (a pesar de no haber olor alguno) podemos seguir pensando que el cuerpo pertenece a un animal que encaje aún en la teoría perruna. Si observamos las patas podemos afirmar también que están dentro de lo que sería la pata de un cánido, aun pareciendo disponer de unas garras que no serían muy propias en ese caso.

Sin embargo es la cabeza la que resulta un poco chocante. Efectivamente por su forma general más recuerda a la de un caballo, exceptuando ahora los dientes, que a la de un perro.

Si nos fijamos en un Pastor Alemán y en un Bull Terrier, ya a simple vista veremos que el parecido con el primero es más bien escaso por no decir nulo, mientras que aún la forma maciza de la cabeza del Bull Terrier podría tener una semejanza, aunque la relación entre el cráneo y la longitud de la mandíbula no cuadren tampoco. Además las orejas del perro son más redondeadas y no tienen mechones de pelo, como sí parecen tener las del ser.

Hay que tener en cuenta que en cuanto a la morfología craneal, el Pastor Alemán y el Bull Terrier son completamente diferentes, pues mientras el primero es un Ortoide, al tener los planos cráneo faciales paralelos, el Bull Terrier es un Certoide pues sus planos son divergentes. Por ello un supuesto cruce podría dar unas características variables y en principio no predecibles. Si bien en el caso del animal aparecido, de compartir alguna característica, más parece tener también planos divergentes.

Y sí, si vamos cogiendo partes de uno y de otro perro, podemos encontrar alguna semejanza, las orejas de uno, el hocico de otro, el cuerpo de uno de ellos… Aunque sigue habiendo detalles que no cuadran del todo y estropean la homogeneidad del conjunto y por tanto de la explicación, como pueden ser el color del pelo que parece quedar, muy oscuro y espeso, las aparentes garras en las manos que parecen más largas de lo usual en un cánido, la morfología general de la cabeza y la longitud de la mandíbula que parece algo más larga de lo que debería, las orejas peludas, o la dentadura que aparentemente se vislumbra y que parece también tener una diferente disposición dentaria a la que presentan ambas razas caninas.

Por lo que me temo que al final la identidad exacta del infortunado animal seguirá siendo un misterio mientras que desde la parte oficial se considerará que hay indicios para poder sostener relativamente sus teorías y ahí se quedarán. De momento lo único incuestionable al 100% es que no se ha identificado el cadáver al 100%. Una vez más me temo que nunca vamos a pasar ya de ahí.

En cualquier caso a la vista de las fotografías y la información que hay del caso, supongo que cada uno puede sacar sus propias conclusiones.

Etiquetas: Criptozoología

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