Qué duda cabe de que aunque desde luego hemos tenido a lo largo del tiempo generaciones y generaciones de estudiosos y un bagaje cada vez mayor de conocimiento acumulado, siguen existiendo lagunas y puntos oscuros en nuestra comprensión del pasado.

A veces además, aparecen cosas que no debieran existir según ese conocimiento global y asumido, lo que pone en evidencia esos flecos sueltos.

En no pocas ocasiones y como si alguna entidad superior quisiera precisamente ponernos en aprietos, esas cosas encima aparecen cuando no se las buscaba y por medio de alguien que tampoco tenía ese objetivo. Leer la entrada completa